Importancia de la alimentación durante la rehabilitación

Hay muchos factores “externos” que influyen en la rehabilitación. Algunos pueden parecer muy evidentes, como los profesionales con quien trabajes, tu dedicación y compromiso con los ejercicios y/o indicaciones que te den los profesionales, el tipo de lesión o enfermedad y su pronóstico, etc. Pero luego hay otros factores, como la nutrición, de la cual hablaremos en este artículo, que puede parecer no tan importante y en cambio, influye de manera notable en tu rehabilitación.

Todos hemos odio hablar de la genética, y tenemos tendencia a creer que de ésta depende casi todo lo que nos pasa o cómo somos, es decir, que “nos toca por herencia”. Hay una parte que viene determinada por la genética, esto está claro. Pero hay estudios que demuestran que el 99% de las enfermedades son epigenéticas.

¿Qué significa esto?, pues la Epigenética hace referencia a cómo afecta el ambiente y los factores externos, a nuestros genes. Por ejemplo, podríamos hablar del clima, de los nutrientes, del estrés emocional, de la contaminación, de los tóxicos, de si somos sedentarios o nos movemos, etc. Por lo tanto, la alimentación formaría parte de estos factores, y es importante considerarla como se merece.

Esto es una fantástica noticia para quien piense que todo estaba determinado por la herencia y que no podemos hacer nada para cambiarlo. Podemos tener una información genética heredada, pero está se expresará o no en función de otros muchos factores. Así que sí que podemos hacer muchas cosas. Por ejemplo, se sabe que el consumo de sustancias tóxicas, o una radiación solar excesiva son nocivos para el epigenoma; y que el ejercicio físico y otros hábitos saludables, tienen un impacto positivo sobre éste.

Vamos a hablar entonces de la alimentación. Os daré algunos consejos basados en estudios, que nos ayudaran en la recuperación, debido a cómo afectan a nuestro organismo.

• Sabemos que el cuerpo humano está formado sobre todo por agua, entre un 60 y un 70%. Por lo tanto, es evidente que hemos de ingerir una cantidad suficiente de agua como para estar bien hidratados.El tejido conectivo, el cual forma gran parte de nuestro sistema musculo-esquelético, contiene mucha agua, y si estamos bien hidratados, tendremos una mejor calidad de dicho tejido. Esta hará, que a la hora de regenerarse o recuperarse de una lesión, le sea más fácil.
• El azúcar es el medio de energía más rápido para obtener energía, pero el cuerpo está preparado para ingerirlo cada cierto tiempo, podríamos considerarlo como si fuera “un premio”.Esto nos da mucha energía de manera rápida.Pero si ingerimos de manera habitual grandes cantidades de azúcar, el cuerpo se habitúa a los niveles altos de insulina, y luego, una pequeña ingesta de azúcar será suficiente para aumentar los niveles de glucosa en sangre, lo que se traduce en la creación de grasa. Y la grasa en exceso favorece los procesos inflamatorios.Si acaban de operarnos, o nos hemos lesionado, probablemente suframos de inflamación, que sería un proceso normal y fisiológico que forma parte de la recuperación, pero que no hay que favorecer, ya que pasadas 48h aproximadamente, ha de comenzar a reducirse. Además la inflamación provoca más dolor, y éste más inflamación.
• Las grasas “buenas” (ácidos grasos insaturados), son muy importantes para el buen funcionamiento de nuestro organismo. Son componentes básicos de nuestras membranas celulares, y precursores de diversas sustancias que garantizan un óptimo funcionamiento, como por ejemplo, las que regulan la presión arterial y la respuesta inflamatoria. Es importante un equilibrio entre los niveles de omega 3 y omega 6. Aquí os pongo algunos ejemplos de alimentos

• Al igual que el azúcar y las grasas saturadas se podrían considerar alimentos “inflamatorios”, hay otros alimentos que ayudan a combatir dicha inflamación. Aquí os doy algunos ejemplos:

• También es importante ingerir alimentos ricos en Vitamina C, ya que después de un proceso inflamatorio, la vitamina C ayuda a eliminar una sustancia que deriva de la inflamación. Si tenemos déficit de vitamina C, favoreceremos la falta de cicatrización y la fibrosis.

Espero que esta información haya sido de tu interés. No dudes en consultar siempre a tu profesional de referencia cualquier duda respecto a la dieta, sobre todo si padeces algún tipo de enfermedad que pueda verse alterada por ésta.

Como ves, vigilar lo que comemos y una dieta equilibrada es básico para una mejor recuperación. ¡Tenlo en cuenta! Te invito a que compartas esta información con personas que les pueda ser útil. Muchas gracias.